La donación de medula ósea es un procedimiento que consiste en la extracción de sangre medular por medio de una jeringa colocada en la parte posterior del hueso de la cadera, se realiza  bajo anestesia general o epidural y no trae riesgo para el paciente más que el que involucra la anestesia. Este tipo de donaciones son fundamentales para tratar pacientes a los cuales se les han diagnosticado enfermedades hematológicas (leucemia, mieloma, errores metabólicos o déficits inmunológicos entre otras).

En general, los pacientes que sufren estas enfermedades tienen la posibilidad de recibir la donación de familiares cercanos, pero en la mayoría de los casos no se encuentran donantes compatibles en el círculo familiar del mismo. Para estos casos se ha creado un registro a nivel mundial al cual ingresamos con una primera extracción de sangre. Luego, si el registro resulta ser compatible con algún paciente que precise la donación, se acude en una segunda ocasión para hacer la extracción de sangre medular.

Puede ser donante de medula ósea toda persona de entre 18 y 55 años de edad, en buen estado de salud, con un peso mínimo de 50 kg y en condiciones de donar sangre. Debemos tener en cuenta que todo donante es libre de darse de baja del registro si así lo desea, por esto se les pide a los donantes que consideren bien su decisión antes de seguir adelante con el proceso que implica registrarse como posible donador.

Donar medula ósea es un procedimiento más simple de lo que en general se estima, sin embargo  se calcula que un 30% (a nivel mundial) de los pacientes que necesitan un trasplante de medula ósea no logran encontrar un donante compatible. Con un simple procedimiento podemos cambiar esa estadística, salvando la vida de personas con nuestra donación.

Desde el Hemocentro Neuquén se invita a toda persona interesada a contactarse para obtener más información sobre la donación de medula ósea.