Con motivo de que hace poco celebramos el día mundial del corazón, encontré que es muy oportuno hacer una breve reseña sobre el órgano que es centro de poesías, de historias de amores y desamores, de canciones sobre traiciones y regocijo, pero también de tratados anatómicos, de capítulos de funciones y de campañas de prevención de su enfermedad.
Hoy sabemos que las enfermedades cardiovasculares (ECV) fueron y siguen siendo la primera causa de muerte e incapacidad en todo el mundo. Y si bien, las mismas pueden ser una lista interminable, que podría incluso en algunos de sus renglones ser absolutamente desconocidas para la mayoría de las personas, hay 2 de ellas que llevan la coronación de 1° y 2° puesto. Y que con nombrarlas, a la mayoría de los pacientes les provoca cierto miedo de padecerlas. Ellas son: el INFARTO AGUDO DE MIOCARDIO y el ACCIDENTE CEREBROVASCULAR. Ambas con grandes posibilidades de matar a una persona, pero si esto no se produce, sí provoca sobrevida con muy importantes discapacidades y limitaciones para la vida cotidiana.
Actualmente 17 millones de personas en todo el mundo mueren anualmente en forma prematura, es decir antes de los 70 años, por estas enfermedades. Se estima que hacia el 2030 (dentro de 14 años) esta cifra alcanzará a los 23 millones de personas. Todos coinciden en que cambiar pequeños hábitos de vida puede cambiar este resultado. Sobre estos cambios se basa la campaña de este año. (Y de casi todos los años).
¿Y si se pudiera adivinar el futuro? Querríamos saber si sufriremos alguna de estas enfermedades? La mayoría de las personas, tal vez adhieran. Pero hay un grupo de escépticos que, a lo mejor dirían: “no creo en adivinanzas”. PERO; y si dijera: NO SON ADIVINANZAS! Tendríamos más adeptos?. Mmmm… Tal vez, quizá, si.
La medicina toma tablas que nos hablan a los médicos de pronósticos. Pronósticos de sobrevida, de muerte, de incapacidad, …. Y también de riesgos.
La OPS (Organización Panamerica de la Salud) que depende de la OMS (Organización mundial de la Salud) ha publicado en su pagina de la OPS una CALCULADORA DE RIESGO CARDIOVASCULAR. Conociendo nuestra Tension arterial habitual (y si no la conocemos la podemos medir rápidamente en una guardia o con un aparato de tensión arterial que disponemos en algunos hogares); nuestro nivel de colesterol y algunos antecedentes (como fumar o ser sedentario), cargamos los valores en una tabla y … MILAGRO! La calculadora de riesgo nos dice la probabilidad de tener una enfermedad a 10 años. Y nos da, según éste, las recomendaciones para intentar evitarlas.
Técnicamente esta aplicación fue encargada al grupo Gedic y a PIXELOIDE por la OPS, y está enteramente basada en el formulario que la Organización Mundial de la Salud propone para la estimación de riesgo cardiovascular en América Latina, zona denominada AMR-B. Este puntaje de riesgo surge de una adaptación de algunas particularidades de la región, sobre la base del estudio de Framingham.
Está diseñada para dispositivos móviles (Android o iphone) y computadoras (laptops) que ayuda al usuario a estimar el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular relevante, tales como infarto de miocardio, angina de pecho, accidente cerebrovascular, en diez años. La aplicación también calcula el índice de masa corporal, ingresando el peso y altura del usuario, y dispone de un recordatorio de medicamentos que permite establecer alarmas que ayudan a evitar interrupciones en el tratamiento. Ofrece además una serie de recomendaciones dirigidas a orientar al usuario sobre las estrategias que puede utilizar para modificar su riesgo cardiovascular.
Su objetivo es ayudar a los médicos a estimar en forma rápida el riesgo cardiovascular y dialogar con los pacientes para analizar en qué medida el riesgo puede ser modificado. Asimismo, intenta ayudar a personas inquietas por su salud, facilitando que puedan estimar la necesidad de una consulta médica cuando su riesgo no es bajo.
Obviamente que se aclara que no remplaza el criterio médico ni la consulta de un facultativo. Demás está decir, que como todo calculador, es un complemento del que puede aprovecharse cuando médico y paciente han combinado rutinas y tratamiento adecuados individualmente.
Me parece interesante echar un vistazo. No se lo pierdan y déjense llevar por la tecnología, naveguen por cada una de las paginas de cálculos y recomendaciones. El futuro informatico ya llego. Ha revolucionado nuestra vida. En este caso, permitámosle que nos contagie de futuro.
http://www.paho.org/hq/index.php?option=com_content&view=article&id=10005&Itemid=41101&lang=es%20
http://www.paho.org/cardioapp/web/#
Hasta la próxima!
Dra. María Elena Romano- MEDICA (UBA). Especialista en Terapia Intensiva